AHORRO DE ENERGÍA

Hasta hace pocos años la sociedad mundial, especialmente en los países desarrollados, no era consciente de la necesidad de ahorrar energía por muy diversos factores.
 Las llamadas energías no renovables (Gas, petróleo, carbón) son altamente contaminantes ya que producen emisiones de CO2 a la atmósfera provocando el calentamiento global del planeta, lluvias ácidas, mareas negras, devastación de parajes...y provocan la degradación de la calidad de vida de los ciudadanos.
 El despilfarro energético ha sido enorme y hemos consumido una buena parte de estos recursos, por lo que se impone la creación de medidas urgentes para frenar los excesos.

Todos los países han creado instituciones oficiales para promover el ahorro de energía. En España, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), tiene un serio compromiso público con la eficiencia energética y las energías renovables, es decir, su actividad se basa en dos puntos de actuación fundamentales: 

  • promover planes de desarrollo de energías renovables
  • planes de acción de la estrategia ahorro y eficiencia energética para el país.

 

 Los organismos oficiales para promover el ahorro de energía de los distintos países, deben cooperar para construir un nuevo modelo energético que garantice la calidad y seguridad del suministro, basado en la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente. Para ello, deben tomar medidas de gestión y realizar importantes inversiones tecnológicas, a la vez que los hábitos de los consumidores tienen que ir cambiando.

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